Introduciéndonos a la Meditación Creativa

Introduciéndonos a la Meditación Creativa

Psic. Paco Hernández (2018) 

 

“Es imposible transmitir a otra persona la sabiduría y la intuición. La semilla ya está ahí. El buen maestro es quien sabe llegar a esa semilla y permitir que despierte, crezca y se desarrolle”

Thich Nhat Hanh

 

La meditación ha acompañado al ser humano durante mucho tiempo de nuestra historia, siendo practicada por infinidad de tradiciones, con diversos estilos e incluso diferentes propósitos.

 

Al respecto, Krishnamurti (2015, p.26) comenta que “la meditación es una de las cosas más extraordinarias, y si uno no sabe lo que es la meditación, es como un ciego en un mundo de colores brillantes, de sombras y luz en movimiento. En su práctica se accede a un estado en que hay completa paz, una paz que posee orden, belleza e intensidad”.

 

La práctica meditativa promueve el cultivo de la conciencia de manera constante, mantenernos en atención plena. Algunos autores la llaman conciencia testigo, donde se estimula a observar la vida como una gran película en la que uno es testigo inmóvil que la contempla.

 

Compartimos la visión de la meditación de Wilber (2001, p.68), en que esta “nos permite relajarnos en nuestra butaca y contemplar la película de la vida sin juzgarla, evitarla, aferrarnos o querer que vaya más deprisa o más despacio. La meditación nos enseña, simplemente, a descansar en la conciencia simple, clara, espontánea, sin esfuerzo y omnipresente y a utilizar nuestra mente como un espejo donde: todo se acepta sin aferrarse y se recibe sin conservar”.

 

El mismo Wilber (2012) refiere que, las tradiciones meditativas suelen distinguir las prácticas de concentración y las prácticas de conciencia plena. Las primeras, ejercitan los “músculos atencionales” necesarios para mantener la atención concentrada en un objeto primario, ya sea la respiración, un mantra, una deidad, un sonido, una sensación, un sentimiento amoroso o una imagen mental. Por su parte, las prácticas de conciencia plena, abonan a la creación de un estado interno que favorece el desarrollo integral (de un estadio a otro) necesario para liberar la atención a estados expandidos sutiles y/o causales sin forma. Ambas prácticas desvinculan la atención de su fijación habitual en la mente discursiva.

 

Al situarnos en el marco comprensivo que nos brinda la Gestalt, las palabras de Vera (s/f) nos refieren que “la meditación es un ejercicio de atención, una práctica de centrado,  de ser uno mismo, de autoconocerse. Es un darse cuenta, al mismo tiempo centrado y vacío, es una actitud de desapego”, por lo que valoramos que es un recurso muy adecuado en procesos de evolución de la conciencia, del desarrollo humano integral, en que atravesamos por diferentes estadios evolutivos, etapas transicionales que nos invitan a ir al encuentro de nuestro ser auténtico.

 

El ‘Programa de Meditación Creativa’ incorpora los recursos del juego cooperativo y el proceso de conciencia del momento presente, mindfulness o ‘atención plena’, para estimular el desarrollo de inteligencias múltiples en los niños y adolescentes, fortaleciendo su creatividad mediante recursos de expresión artística. Durante las sesiones el practicante explora la observación, reconocimiento, gestión emocional y mental, favoreciendo al aumento de la capacidad de aprendizaje, de creatividad y al fortalecimiento de sí mismo. A su vez, el mismo Vera (s/f) refiere que el meditar “aporta en el cuidado de la salud al cultivar una actitud de fluidez que nos invita a permanecer en la apertura al cambio”.

           

Consideramos  esencial para el desarrollo humano integral, contribuir y cuidar procesos de interiorización, en que niños y adolescentes observen y reconozcan los recursos propios con que cuentan para convivir y responder a los estímulos procedentes del medio ambiente, siendo posible así, optar por estilos de afrontamiento saludables que favorezcan resolver sus necesidades de manera única y creativa, reafirmando de este modo, el ser auténtico que están siendo.

 

Una de las pautas del programa de meditación creativa hace énfasis en la espontaneidad y en la expresión del estado meditativo a través del arte. Como expresa Naranjo (1999, p.18), “cuando la espontaneidad interna del individuo actúa en armonía con el mundo entra en juego con una coherencia y sabiduría más profunda de la mente”, se contacta con nuestro ser. Al dejar a la mente seguir su curso libre y espontáneo, contribuimos a que suceda la autorregulación de nuestro organismo.

 

Debido a que el juego es el vehículo primordial de la práctica, y en el jugar interactuamos con otros, estamos convencidos de que en el encuentro con otros se amplía el autoconocimiento y el reconocimiento del otro, al invitar al participante a observar aspectos de su forma de ser, contrastarlos y diferenciarse del entorno, percibiendo así los estilos con que se responde a los estímulos del ambiente.

 

¡Te invitamos a jugar a estar presente y continuar autocreando la existencia en plenitud!

  

REFERENCIAS

Krishnamurti, J. (2015) La mente en meditación. España: Ed. Kairos

Naranjo, C. (1999) Entre meditación y psicoterapia. España: Ed. La Llave

Vera, A. (s/f) Meditaciones para un enfoque terapéutico de la meditación

WIlber, K. (2001) Diario. España: Ed. Kairos

Wilber, K.; Patten, T.; Leonard, A.; Morelli, M. (2012) La práctica integral de vida: Programa orientado al desarrollo de la salud física, el equilibrio emocional, la lucidez mental y el despertar espiritual del ser humano del siglo XXI. España: Ed. Kairos

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